Yves Sadurní

Tenochtitlán, 1976.
Yves Sadurní Dupont desarrolla su producción artística desde el activismo, en posturas que cuestionan la realidad sociocultural de su contexto inmediato; de ahí que México, España y Francia, Inglaterra, India, Filipinas o Nueva York hayan sido los escenarios para articular un discurso moral, inclusivo y controversial, que explora en argumentos ontológicos los comportamientos humanos y sus consecuencias. EL dibujo, la pintura, el diseño, la arquitectura, la escultura, la intervención pública o el audiovisual funcionan como herramientas para acceder de lo micro a lo macro, del pasado al presente, de lo general a lo particular, de la fabulación a lo real; dualidades estas que responden a la incesante búsqueda del ser y a la crítica de sistemas de consumos y sociedades de modelos fallidos.
Cree en el rol social del arte como detonante y regenerador de tejidos, capaz de sensibilizar y promover la reflexión a través de la experiencia estética y contemplativa. Le interesa generar corrientes de pensamiento y posibles catarsis conceptuales a través de acciones plásticas que despierten la curiosidad y obliguen al espectador a la mirada interior. Concibe la interdependencia cual esencia de la fuerza creativa, y la vida en su conjunto en esa inmensa conexión donde el arte resulta el medio, que lleva de la mano al individuo hasta hacerlo emerger de la colectividad.